Un llamado al 911 alertó al personal policial sobre la presencia de cuatro sujetos violentando la ventana de una vivienda para ingresar. Sin embargo, el accionar de la fuerza en el lugar, obligó a los sospechosos a escapar a bordo de un vehículo en el que se movilizaban y que les había vendido el damnificado.
Con el apoyo de sus pares de la Unidad 30º se inició una persecución que culminó en el barrio Guido, donde uno de los implicados se despojó del arma y, tiempo después, fue aprehendido junto a sus cómplices.
La Fiscalía, una vez informada del hecho, ordenó que los jóvenes sean trasladados a la SENAF, mientras que los demás aguardaron nuevas directivas. Por otro lado, el vehículo fue secuestrado y trasladado al predio policial.