Todo comenzó en la tarde del sábado, con un llamado telefónico que activó los protocolos de emergencia y puso en marcha una operación de rescate que no se detendría hasta comprobar que el hombre estuviera fuera de peligro.
El personal policial, movilizado rápidamente al sitio, incluía al Oficial Ayudante Brian Giordano, quien no dudó en lanzarse al agua al percibir los gritos de auxilio de una persona, que se encontraba sujeto a una rama después de caer de un barranco mientras pescaba. El policía logró llegar a la víctima, abrigarlo con mantas y sacarlo del agua.
La víctima presentaba signos de hipotermia grave y estaba ingresando en paro cardiorrespiratorio. No obstante, el Oficial Ayudante Giordano dominó la situación con aplomo y profesionalismo, llevando a cabo maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP). Estos esfuerzos consiguieron estabilizar al hombre hasta que la ambulancia llegó al lugar.
El rescate de la víctima, es un claro ejemplo del compromiso y la valentía del cuerpo policial. Cada segundo contaba y estuvo presente la importancia de los entrenamientos continuos y la preparación para emergencias, factores que resultaron determinantes en el éxito de la operación.