La actividad central se desarrollará mañana en los jardines del Ministerio de Economía, sobre la costanera de Viedma, organizada desde el banco de sangre del Hospital Artémides Zatti.
El programa incluye, de 16 a 20, espectáculos en vivo, una colecta de extracción de sangre a donantes voluntarios y la realización del test para determinar grupo sanguíneo a quien lo requiera.
En esta oportunidad, el 9 de noviembre recordará la primera transfusión sanguínea, realizada hace 100 años por el doctor Luis Agote en el Instituto Modelo del Hospital Rawson de Buenos Aires.
Este descubrimiento científico impulsado por ese médico pionero, investigador y político, brillante exponente de la generación del ’90, fue la transfusión de sangre anticoagulada con citrato de sodio realizada en 1914 a una madre que sufría una hemorragia post-parto.
Los beneficios de esta técnica facilitaron nuevas alternativas en el desarrollo de la medicina en el mundo. La transfusión sanguínea permitió salvar millones de vidas y fue soporte imprescindible en el desarrollo de cirugías, trasplantes y tratamientos oncológicos, entre otros, convirtiéndose en un hito para las ciencias médicas.
Cabe señalar que el 9 de noviembre fue declarado Día Nacional del Donante Voluntario de Sangre a través de la ley 25.936.
La donación de sangre se enmarca en un método seguro, cuyas bases son constituidas por normas internacionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la Asociación Americana de Bancos de Sangre.
Puede ser donante voluntario toda persona de entre 18 y 65 años de edad, con un peso superior a los 50 kilos, y es fundamental no presentar ni haber padecido ninguna enfermedad transmisible a través de la sangre.